El 18 de Diciembre del 2021.
En Villa de Leyva, Colombia... obvio... donde empezó el amor!
Específicamente en la Hacienda Veracruz.
A las 13:00. Si llegas más tarde te perderás la entrada de los novios. A las 22:00 se acabará la fiesta, aunque no te asustes, será posible quedarnos un rato más en la hacienda.
Luego de unos cuantos años de romance, aventuras y mucho aprendizaje, el 25 de diciembre de 2019 por fin nos pusimos serios (José se puso serio 🤪) y decidimos casarnos. Tuvimos un pequeño retraso debido a un tal COVID, aunque el sueño de compartir nuestra felicidad y celebrar nuestro amor al lado de nuestra familia más cercana y nuestros mejores amigos siempre se mantuvo. Por esto nos casamos por la iglesia el día 18 de Diciembre del 2021, en Villa de Leyva, Colombia. Queremos que disfrutes este día de la mejor manera posible: rezando 😇, comiendo 🤤, hablando carreta 😎, bailando 💃🏼🕺🏼 y molestando 🥳. La idea es que nos reunamos todos y saquemos toda esa energía reprimida durante estos últimos años. No esperes mucho protocolo, pero eso si, lleva contigo tu mejor actitud, tu mejor pinta y tus mejores pasos; nosotros nos encargamos del resto.
El trabajo de nuestros sueños nos unió en una entrevista sin ni siquiera imaginarlo. Trabajamos juntos por un año sin saber que iba ser el comienzo del resto de nuestras vidas. Andábamos cada uno en nuestros cuentos hasta que un viaje a Villa de Leyva y uno que otro guaro nos llevaron al primer beso. La cosa no arrancó muy en serio pero el Banrep nos volvió a unir. Cafés, almuerzos, spinning, comidas, ascensores, un viaje a Estados Unidos, y otro montón de planes nos hicieron inseparables durante dos años. Nunca fuimos novios, o al menos eso decíamos, pero los dos sabíamos que esta conexión era única y lo suficientemente fuerte para lo que se venía. Nuestros caminos se bifurcaron y el Océano Atlántico nos separó por dos años en los que vivimos altos y bajos, pero en los que el amor se hizo más fuerte y la paciencia se convirtió en nuestra mejor aliada. En la búsqueda por volver a estar más cerquita, inexplicablemente (para José) aunque racionalmente (para Daisy) dejamos de estar en diferentes zonas horarias pero aún nos separaban 3 horas de avión. Las esperas de 3 meses para vernos en Bogotá se convirtieron en viajes y aventuras mucho más frecuentes y Barcelona y Berlín se convirtieron en nuestros hogares. En uno de esos viajes en los que celebraríamos la navidad del 2019, decidimos ponernos nuestras mejores pijamas, cocinamos nuestra receta francesa favorita, abrimos una botella de nuestro vino emblema, y sentados frente al árbol de navidad dijimos ¡Sí! La larga espera terminó y hoy escribimos este relato desde nuestro hogar en Barcelona, a la espera de celebrar contigo en Diciembre y seguir escribiendo nuestra historia de amor.